¿Cuán efectivos son los juicios políticos?
DOS vicepresidentes fueron sometidos a juicio político: Alberto Dahik, en 1995 por el caso Gastos Reservados y Jorge Glas, a finales de 2017 por la trama Odebrecht. Ninguno fue censurado. El gobierno de Sixto y Dahik tenía ocho de las 77 curules legislativas. Sin embargo, solo hubo 39 votos para su destitución (se necesitaban 55). Dahik, empero, renunció porque la Corte Suprema le abrió un juicio penal y pediría su arresto; recibió asilo en Costa Rica. Glas, vicepresidente de Lenín Moreno, ya guardaba prisión preventiva y tenía abierto el juicio en la Comisión de Fiscalización, con mayoría correísta. Pero su presidenta María José Carrión dilató el proceso hasta que Glas perdiera el cargo por abandono en enero de 2018. En ambos casos: el juicio político fue consecuencia de procesos penales. Las destituciones de Abdalá Bucaram (1997) y Lucio Gutiérrez (2005) fueron vía resolución, polémicas y sumarias.
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2023-03-09T08:00:00.0000000Z
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