Editorial Vistazo

LA HORA DEL "CIENTÍFICO"

Uno de los mayores referentes del boxeo nacional de los últimos años peleará el 18 de marzo por el ranking mundial contra el mexicano Valentín Martínez Guzmán.

Por Sébastien Mélières

Hace exactamente 10 años, Érick entrenaba en un viejo gimnasio de La Tola, en el centro de Quito. Entre el polvo y la luz escasa, el manabita levantaba pesas hechas de una mezcla de cemento y peleaba en un cuadrilátero con lonas rotas. Tenía ya dos años como profesional y todo un pasado de estrella como juvenil: oro como peleador de la Selección de Pichincha a los 12 años y otra presea dorada obtenida en los Juegos Bolivarianos de Sucre en 2009.

Tenía todas las virtudes de un campeón internacional pero la falta de ayuda económica empezaba a mermar sus grandes sueños. “Entrenaba duro pero no veía futuro para mí. Tenía un representante pero no me pagaba por las peleas”, expresa el portovejense de 34 años.

Fue entonces, en el año 2014, cuando Ítalo Perea, su excompañero en la Selección de Pichincha, le escribió para decirle que fuera a Estados Unidos. Detrás de Perea estaba Ely Mackay, estadounidense de padres ecuatorianos que se convirtió en mánager de Érick y lo llevó a los cuadriláteros de EE.UU. Luego de un año con él, firmó con Al Haymon, quien es conocido por su estrecha relación con el boxeador Floyd Mayweather Jr.

Ecuador versus Estados Unidos

“Hoy en día tengo un contrato con una promotora estadounidense y divido mi tiempo entre San José (California) y San Antonio de Pichincha”, comenta Érick, conocido como el “Científico”. El boxeador tiene una marca de 26 peleas ganadas (13 por nocauts) y seis perdidas (una por nocaut).

Comenta que tiene contrato por cinco años más con la empresa norteamericana. “Son los últimos años de mi carrera y tengo mucho que ganar todavía”, acota el campeón sudamericano de la división peso wélter (147 libras) del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) de 2018.

Érick tuvo que irse a Estados Unidos para vivir a plenitud el profesionalismo: “En la época de oro del boxeo en Ecuador se llenaba la plaza de toros para cualquier pelea pero todo fue decayendo y cuando yo era amateur veía a los profesionales gordos y poco preparados. Segundo Mercado cerró el mejor ciclo del box nacional”, analiza el peso wélter ecuatoriano.

Érick se considera un púgil inteligente y con mente fría. Sabe que un mal golpe podría provocarle serias secuelas e inclusive hasta la muerte. “Hay muchos boxeadores jóvenes que suben al ring y tiran golpes sin preocuparse de su defensa, la mente es tan importante como la fuerza, la técnica y la explosividad. Siento que puedo ganarle a cualquiera”, añade el hijo del “Alacrán”, apodo que se le daba a su padre José cuando era boxeador profesional.

El 18 de marzo Érick peleará contra el mexicano Valentín Martínez Guzmán y lo hará en el Quorum del Paseo San Francisco. Pelear en Ecuador es todo un símbolo para él. “Cuando se acabe mi carrera, quiero regresar a tiempo completo acá y entrenar a las jóvenes promesas que tiene el Ecuador. A lo largo de tantos años comprendí el mundo del boxeo y definitivamente es importante prepararse y estudiar. En cada pelea es la mente que termina ganando. Cuando empecé a tener dinero, era muy joven y perdí la cabeza, gasté mal mi plata y me creí invencible”, finaliza. “Quiero construir un legado y acompañar a los talentos ecuatorianos. Soy más conocido en Estados Unidos que en mi propio país, allá he peleado en Las Vegas, California, Misisipi, Texas y Nueva York y he dejado el nombre de mi país en lo alto. Pronto me tocará ser alguien en Ecuador”.

En octubre de 2018 se consagró campeón sudamericano de la división wélter (147 libras) del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).

Deporte

es-ec

2023-03-09T08:00:00.0000000Z

2023-03-09T08:00:00.0000000Z

https://vistazo.pressreader.com/article/282424173438004

Vistazo