LA PEQUEÑA CAPITAL DEL NORTE

Los cantones de Imbabura se interconectan para confluir entre manufacturas y alimentos. Su preponderancia se extiende en las provincias del norte del país.

Imbabura está compuesta por seis can- tones, cada uno tiene una actividad económica principal. Por su ubicación estratégica, Imbabura se ha convertido en un centro zonal de comercialización. Esto se debe a que los productos provenientes de las provincias norteñas como Carchi, Esmeraldas, Sucumbíos, e incluso el norte de Pichincha; llegan a esta provincia para ser distribuidos o comercializados. Es por esto que, para algunos expertos, Imbabura, y precisamente Ibarra, es una capital dentro de la subdivisión zonal al norte del país.

El comercio es la principal actividad económica de Ibarra, por lo tanto, también lo es de la provincia entera. Según proyecciones de la Cámara de Comercio y Producción de Ibarra (CCPI), cerca del 80 por ciento de los ingresos imbabureños corresponde a actividades comerciales. El presidente de la CCPI, Roberto Aguilar, agrega que el tipo de comercio pertenece a productos primarios o agrícolas.

Entre las ventajas de la provincia destaca la diversidad climática, que varía desde los 1.000 metros en el Valle del Chota, hasta los 2.460 metros sobre el nivel del mar en Otavalo. “Por tal mal motivo, Imbabura tiene una capacidad de producción en el campo durante todo el año”, indica Jesús Muñoz, prorrector de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador-sede Ibarra (PUCE-SI). De hecho, otra de las ventajas de la provincia es que, al contar con un importante flujo comercial y ciudadano, cuenta con más de 50 instituciones financieras y cerca de seis universidades, para la capacitación del talento humano.

A pesar de todas esas bondades, Imbabura ocupa el puesto 11 entre las 24 provincias del país con mejor generación de ingresos en ventas y exportaciones, de acuerdo a cifras del Servicio de Rentas Internas. Las dificultades para que la provincia despunte son varias. Entre esas, Aguilar (CCPI) señala que la falta de un plan de desarrollo económico hace que la materia prima sea entregada tal cual, “por lo que no se le da un valor agregado y no mejora su costo”. Mientras que Muñoz (PUCESI) apunta a que las grandes empresas solo abastecen el consumo interno. Y otras, solamente la planta de producción se encuentra en Imbabura, las firmas suelen estar domiciliadas en Pichincha, por lo que facturan y tributan allá.

Aun así, existen sectores económicos que empiezan a ganar protagonismo, como la exportación agrícola. Imbabura produce aguacates de calidad, granadilla, café, fréjol y hasta mango. Por otra parte, el turismo comunitario está emergiendo, principalmente por sus recursos naturales como los lagos y las montañas. Y Muñoz (PUCE-SI) apunta a la minería como otro sector “con muchos minerales por explorar”.

Imbabura destaca por albergar importantes centros de salud, universidades, instituciones financieras y demás entidades concurridas. No hay necesidad de avanzar hasta Quito.