Editorial Vistazo

El Carapaz que nació para reinar

En cinco años como profesional, Richard Carapaz llegó al podio en las tres Grandes Vueltas Ciclísticas. Es el segundo latinoamericano en hacerlo y el vigésimo en general en la historia de este deporte.

Jorge Cavagnaro A.

En los últimos 28 años se han inscrito 160 personas con el apellido Carapaz, y de esos 85 fueron en la provincia del Carchi. En Ecuador los apellidos comunes son otros, pero actualmente mencionar Carapaz sí se volvió común. Justo por uno que lleva de nombre Richard, nacido hace 28 años en esa zona del país, privilegiada por la tierra fértil pero prohibida de ciertos lujos.

Quizá esa carencia forjó el carácter de quien hoy es el mejor deportista ecuatoriano y, sin duda, uno de los mejores de la historia. Richard Carapaz no es solo el segundo latinoamericano de todos los tiempos en subirse al podio en las tres Grandes Vueltas Ciclísticas del mundo. Puso a este deporte en el mapa del país: un análisis de Google Trends muestra que a partir de su triunfo en 2019, en Italia, la búsqueda de la palabra ‘ciclismo’ en la web aumentó significativamente.

La vida de Carapaz tiene todos los ingredientes para una buena película, aunque sería difícil escoger la escena inicial. Alguno eligirá su origen, en la humilde comunidad de Playa Alta, en Tulcán, donde ordeñaba vacas; otro recordará el accidente que tuvo en 2014, mientras entrenaba; o quizá su expulsión de la delegación ecuatoriana en los Juegos Bolivarianos, en 2017.

Quien se anime a contar la vida de Carapaz tendrá no solo esas historias para ilustrar sino la de éxitos obtenidos desde que decidió subirse a una bicicleta. La de los títulos ya celebrados y los que vendrán, con seguridad, ya que a los 28 años se sacó de encima varios pesos para ciclistas de su edad: ganar en los torneos más importantes de este deporte.

Paso a paso

Tiene cinco años como ciclista profesional pero nació, creció y planea vivir el resto de su vida pedaleando una bicicleta. El hijo de Antonio Carapaz y Ana Luisa Montenegro se crió en el campo, donde los pies o las ruedas de las bicicletas son las herramientas para recorrer grandes distancias. “Aprendí a conducirla desde muy pequeño, la usaba para todo”, recuerda.

Su primera bicicleta se la robaron, la segunda la encontró en un montón de chatarra oxidada mientras ayudaba a su papá; no tenía llantas ni asiento, pero “para mí era una bicicleta epecial”, dijo Richard en una ocasión. Hoy, si acaso la vida es grata con quienes se esfuerzan, ese chico compite subido en una bicicleta que

cuesta más de 15 mil dólares.

Si bien su ascenso empezó en 2019 con el Giro de Italia, para ese entonces ya había triunfado en la Vuelta a Navarra y en la Vuelta a Asturias (esta última en dos ocasiones consecutivas). El año pasado dejó el equipo español Movistar y firmó con el inglés INEOS Grenadiers, convirtiéndose en uno de los ciclistas estrellas a nivel mundial.

Previo a mostrar su talento en las pistas europeas, la ‘Locomotora del Carchi’, como se lo conoce a Richard, empezó su carrera en Sucumbíos, con la exgloria del ciclismo ecuatoriano, Juan Carlos Rosero. A Richard lo encontró en la Unidad Educativa El Playón, donde estudiaba. Luego acompañó al mismo Rosero hasta Panavial-coraje Carchense, un equipo que ahora solo se llama Coraje Carchense.

En 2013 pasó al equipo RPM Team Ecuador, pero fue breve, ya que regresó a Panavial-coraje Carchense donde hizo sus últimos kilómetros hasta cruzar la frontera para firmar contrato con el club colombiano Strongman-campagnolo.

Su último entrenador en Sudamérica fue Luis Alfonso Cely, dirigía ese equipo. En 2015, bajo su tutela, Carapaz fue el primer extranjero en ganar la Vuelta a la Juventud en Colombia, con 21 años. Hoy sigue ostentando ese mérito. “Es el triunfo más importante de mi carrera porque gané en una tierra de campeones como es Colombia”, detalla una nota de esa fecha del diario colombiano El Tiempo.

No duró mucho en esta zona del mundo. Se lo llevaron a España, al equipo Lizarte, que funciona como una suerte de etapa de preparación para los ciclistas que quieren enrolarse en equipos profesionales. Allá llegó por gestión de Pedro Rodríguez, exciclista ecuatoriano que compitió en ese equipo en los noventa.

“Si el primer día que vino a Lizarte nos

decían que iba a ganar el Giro, pues no lo creíamos”, contó Iosune Murillo, su entrenadora en España, días después a su primer gran éxito en Italia. Apenas llegó a España quedó segundo en una de las carreras más importantes en ese país, la Valenciaga. En ese mismo año ganó la Vuelta a Navarra.

El equipo Movistar lo sumó a mediados de 2016 como aprendiz y en junio del siguiente año terminaba segundo en la Ruta de Occitania, una carrera disputada en el sur de Francia. Pocos meses después fue el primer ecuatoriano en participar en una Gran

Vuelta, en esa ocasión en la de España, ubicándose en el puesto 36 a casi dos horas de quien ganó la carrera, Chris Froome. Carapaz, mientras compitió con el equipo Movistar, ganó dos Vueltas a Asturias y su momento máximo fue en Italia, en el Giro 2019, venciendo al dueño de casa Vicenzo Nibali, y convirtiéndose en el segundo latinoamericano en ganar esa prueba.

Su llegada al equipo inglés INEOS Grenadiers generó polémica. Su anterior equipo, Movistar, cuestionó su decisión. Carapaz, en una entrevista con el youtuber Valentí Sanjuan,

Carapaz es uno de los 10 mejores ciclistas del momento. El primer lugar en el Giro de Italia lo convirtió en candidato a ganar todas las competencias.

explicó que vivió circunstancias difíciles en el conjunto español. “No sabes si el día de mañana el equipo no va a esperar por ti porque el líder será otro, es como llevar un cuchillo detrás y no saber si te va a caer a ti hoy o mañana”.

En el equipo inglés, Carapaz llegó como el relevo generacional de Chris Froome. Sí, el mismo que en 2017 ganó la Vuelta a España, que fue la primera participación de Richard en las Grandes Vueltas. Paradójicamente el año pasado Froome, quien es siete veces ganador de Grandes Vueltas, fue el gregario (ciclista que compite para ayudar al líder del equipo) de Carapaz en ese mismo evento, donde Richard fue segundo.

Ya con sus éxitos en Italia y España, le tocaba confirmar su talento en el Tour de Francia, en el que ya había competido en 2020 aunque no como líder del equipo. En esa ocasión debió apoyar al colombiano Egan Bernal pero el retiro de este último llevó a Carapaz a liderar a INEOS, aunque con la competencia ya iniciada no pudo escalar a mejores posiciones y terminó en decimotercer lugar.

Este año regresó a Francia compartiendo liderazgo de equipo con el británico Geraint Thomas, aunque al final el talento de Carapaz lo convirtió en la ficha clave de su equipo. El ecuatoriano terminó en tercera posición mientras su compañero de equipo, Thomas, llegó en el puesto 41. Además, semanas antes el ecuatoriano ganó la Vuelta a Suiza.

Hoy Carapaz es uno de los ocho latinoamericanos del equipo INEOS (también está el ecuatoriano Jhonatan Narváez) y por sus éxitos eregido como uno de los referentes. Mientras a nivel mundial está en el top 10 de los ciclistas con más puntajes en el año, con posibilidades de terminar entre los tres primeros.

A sus 28 años está en la franja de edad, según los expertos, donde los ciclistas alcanzan la madurez adecuada para convertirse en leyendas. Quizá cuando usted lea esta nota haya sumado un nuevo éxito en los Juegos Olímpicos de Tokio, representando al Ecuador; o quizá no. Pero seguro escribirá un nuevo capítulo para su historia… Esa historia que empezó en una pequeña comunidad del Carchi con una bicicleta oxidada.

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2021-07-22T07:00:00.0000000Z

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